Ubeda. Finaliza la Romeria de la Chiquitilla del Gavellar.

Un año más "La chiquitilla" ha vuelto a su casa junto a los ubetenses que la anhelaban desde el pasado septiembre cuando recorría la cuesta camino del Santuario. Algunos han podido tenerla más cerca cuando se han acercado durante estos meses de invierno al Santuario acompañandola y arropándola durante la celebración de la Santa Misa, pero también se sentían impacientes por tenerla más cerca día a día.

Todo comenzaba a las 3.00h de la madrugada del primero de mayo cuando se reunen los romeros/as en el Bar de los Buñoleros una vez que ha comenzado el estruendo de cohetes que anuncian la impaciencia de los mismos por salir en la búsqueda de de Madre, la más grande y a la vez chiquitilla.

Tras el recuentro nuevamente un año tras otro, un buen café y el rezo de la oración que guiará los pasos hasta el Santuario,se enciende el farol guía que iluminará el camino y con el banderín de los romeros/as se inicia la marcha.

Con la única luz del farol guía y las linternas de los romeros/as se hace la primera parada para rezar a todos aquellos devotos/as que ya no pueden acompañar pero que se encuentran en el cielo y desde allí viven su romería y disfrutan de su Madre y Patrona.

Este año había prisa y nervios por llegar y el camino se ha hecho más corto a las 5 de la mañana entraban los más adelantados a la aldea de Santa Eulalia y esperaban al resto para realizar nuevamente una oración para dar gracias por haber cumplido la mitad de la promesa.

 

Como siempre son bien recibidos por los aldeanos que con mucho cariño han preparado un buen desayuno y un buen vino dulce y café para reponer fuerzas y prepararse para "la cuesta".

 

 Los mismos nervios siguen acompañando y la bajada se hace muy rápida, la campana que anuncia la llegada al Santuario empieza a sonar antes del amanecer, a las 6,30h ya se oía como es tradicional el canto del ruiseñor junto con el repique de la campana, allí la Real Archicofradía tiene preparado un nuevo desayuno para el esfuerzo de la cuesta, hay cansancio y sueño, se reponen fuerzas.

 

Después de esperar pacientemente ese buen café, se inicia el rezo del Santo Rosario y la Santa Misa de romeros/as, una misa especial para todos aquellos que se encuentran en ese momento en el Santuario y que han madrugado para poder estar al lado de la Virgen de Guadalupe, es un sentimiento muy fuerte y una buena manera de prepararse para la subida con ella en los hombros. Las voces del Coro Los Reales anunciaron la partida, y una vez cantada la salve a los pies del altar que hicieron saltar más de una lágrima a los presentes, se coloca a la Madre en las andas romeras y los hombros empiezan a acercarse para llevarla.

 ¡Ya sale! Con la primera luz del día, ya tienen sus devotos a su madre en sus hombros, empieza la subida, queda un buen camino de polvo, espigas y amapolas, entre olivares va nuestra Chiquitilla es duro pero reconfortante cada vez que se da un paso y otro y otro y se va viendo más cerca el final de la cuesta, por fin Madre tus romeros te traen de vuelta.

En la entrada esperan los aldeanos y la cofradía filial de Santa Eulalia que acompañaran a la Virgen por las calles de la aldea anunciando su llegada.

A las 11,00h la Virgen de Guadalupe es entronizada para a continuación oficiar la Santa Misa en la que participó el coro Los Romeros de Santiago, Una vez finalizada la misma se llevó a cabo la ofrenda floral encabezada por la Romera Mayor e Infantil y resto de romeras/os.

 

Llegó el momento del pase de carrozas y caballistas, este año han desfilado 10. La Cofradía de la Expiración y de la Humildad (no han podido hacer carroza) tuvieron el gesto de ofrecerle a la Virgen de Guadalupe un ramo de flores. El primer premio lo ganó la carroza "La Chiquitilla del Gavellar" el segundo para la carroza de la Cofradía de Las Lágrimas y el tercer premio para la carroza del grupo de Teatro "En cuerpo y alma".

 

Una vez terminado el rezo del Santo Rosario, la Virgen de Guadalupe ya se encuentra en sus andas de plata para su traslado a Úbeda.

 

A su llegada a Úbeda, y tras su entrada al cementerio para realizar una oración por todos los que ya reposan y están más cerca de "Su Virgen de Guadalupe", la banda de Cornetas y tambores de la Cofradía de la Oración en el Huerto la recibía, también era recibida por una gran traca, que como años anteriores, es donada por unos devotos de la Virgen. Una vez alcanzada la tribuna, D. Juan Luis Millán la recibe con su sencillas y cálidas palabras de un gaudalupano le rezo una salve y recordó a todos los que en esos momentos no podían recibirla porque ya han partido hacia el Padre y a los que la recibían por primera vez y seguro que repetirían. Pidió a Nuestra Madre para que sepamos transmitir el amor de Dios y para que también podamos salir de la crisis. Que haya justicia social y que los más débiles dejen de sufrir.

 

Una vez terminadas sus palabras, la Chiquitilla tomó camino hacia la iglesia de la Stma. Trinidad donde quedó hasta el día 4 de mayo.

 

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