lunes, 15 de diciembre de 2014

Gente de Paz. Sendero de Sueños: La belleza celestial... es eterna.

Menos mal que la belleza celestial es eterna y que hay joyas que resisten a la manos que la tocan... Tal es su belleza, que no importa el no saber cogerle el punto, como se suele decir. Es difícil hacer lo bello feo, tú estuviste a punto de conseguirlo... Menos mal, que la belleza celestial es eterna.
Después de tocar el Cielo, de rozar con las manos lo bello... llegan, te bajan a lo terrenal y te recuerdan que no todo el mundo es capaz de apreciar la belleza celestial, esa que es eterna.
Somos capaces de opinar sobre las acciones de los demás, pero no las que hacemos nosotros mismos o consentimos que hagan otros en nuestro nombre. Recuerdo, como a Fernando Marmolejo, prioste de la Hermandad de la Esperanza Macarena, se le criticó por el montaje tan "novedoso" que, según algunos entendidos, realizó para el besamanos de la Reina de San Gil. Lo hicieron públicamente y, no pasó nada. Aquí, si por alguna casualidad, se nos ocurriera hablar de algo parecido...seríamos declarados, por lo menos... herejes.
Pues bien, no hablaré de la forma que tuvo alguna persona de vestir a aquella joya del Domingo de Ramos, por no ser candidata a quemarme en la hoguera. Sin embargo, si me gustaría hablar de algo que no puedo consentir, como hermana, como cristiana y como cofrade. 
No me gustaría que mis hermanos de las Penas lo tomaran como un ataque, más bien como unos modestos consejos para no volver a caer en el error, que entiendo que ocurrieron por los nervios propios del acto.
Me gustó mucho la numerosa asistencia de público, más que otros años. La puesta en escena para una Función Solemne, sin embargo, en mi humilde opinión dejó que desear:
1. El bacalao, que representa a la Hermandad corporativamente, y la Bandera Concepcionista, que representa nuestros carácter mariano y nuestra defensa al Dogma de la Inmaculada, deberían de haber estado en un lugar preferente en el Altar Mayor, no detrás.
2. El Credo se reza siempre, sobretodo el Domingo. La Oración de los Fieles, siempre, y vuelvo a repetir, SIEMPRE, van detrás.
3. Para poder jurar la defensa del Dogma de la Inmaculada Concepción, primero hay que proclamarlo a la Asamblea.
4. Los ciriales se alzan en: proclamación del Evangelio, en el que además, 2 de ellos deberían flanquear el ambón, por ser la luz que alumbra la Palabra; durante la Consagración y en el rezo de la Salve.
5. Mientras el sacerdote esté hablando, el pertiguero no debe golpear la pértiga en el suelo, para no interrumpir.
6. Por último, transcribo la letra del Salve Regina para que en próximas ocasiones pueda ser rezada o cantada por la mayoría de los asistentes.
Salve, Regina, Mater misericordiae,
vita dulcedo, et spes nostra, salve.
Ad te clamamus, exsules filii Hevae,
ad te suspiramus, gementes et flentes,
in hac lacrimarum valle.
Eia, ergo, advocata nostra,
illos tuos misericordes oculos ad nos converte;
et Iesum, benedictum fructum ventris tui,
nobis post hoc exilium ostende.
O clemens, O pia, O dulcis Virgo Maria.
V./ Ora pro nobis, Sancta Dei Genetrix.
R./ Ut digne efficiamur promissionibus Christi. Amen
Reitero que no es mi intención molestar o hacer leña del árbol caído, simplemente dar mi opinión. Como he explicado anteriormente puedo entender que todo pudo ser fruto de los nervios del momento, pero esta solemnidad, la Hermandad de las Penas debe cuidarla al máximo.
Al igual que muchos han criticado los actos de otros, deben aprender a aceptar críticas constructivas, que espero que sirvan para próximas ocasiones y que no ocasionen malestar alguno. De no ser así, estaré encantada de responder a todo aquello que se me pregunte, siempre y cuando, por decir mi humilde opinión, no se me tache de hereje o de mala cofrade, porque lo único que pretendo es que la liturgia se cuide como se cuidan otros aspectos en esta mi Hermandad.


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